¿Será verdad que es tan importante denunciar el Acuerdo entre la Santa Sede y el Estado español, para que sea una exigencia de la pretendida y deseada renovación del partido socialista español? ¿Se conseguirá con ello salir antes de la crisis económica que castiga a tantos españoles? ¿Se conseguirá con dicha denuncia de los acuerdos elevar el nivel moral, la conciencia de ciudadanía, ahuyentar la corrupción de la vida política y económica? ¿Será verdad que sin dichos acuerdos el ciudadano español se sentirá más libre, más integrado en una sociedad democrática y justa? Estimo que la razón del PSOE para incluir en su programa la denuncia de dichos acuerdos será que la respuesta a las preguntas es un SÍ.
Pues bien, tendrá que convencernos con argumentos sólidos el partido socialista de que esto es así. Argumentos que se basen en números, en descripción de los perjuicios que aportan a la sociedad española esos acuerdos, de los inconvenientes que ofrecen para una sociedad más libre, justa e igualitaria, en fin para la felicidad de los españoles. Los creyentes católicos estarían dispuestos, precisamente por ser creyentes, a unirse a la petición del PSOE si efectivamente los dirigentes socialistas aportan argumentos que nos hicieran ver que, una vez suprimidos los acuerdos vigentes entre la Santa Sede y el Estado español se conseguirían esas ventajas sociales, económicas, morales.