18 de diciembre de 2014
0 comentarios
"Oh Adonai, Pastor de la casa de Israel, que te apareciste a Moisés en la zarza ardiente y en el Sinaí le diste tu ley, ven a librarnos con el poder de tu brazo".
Adonai es uno de los nombre de Dios en el judaísmo que, se emplea para evitar el de Yahvé. Dios Adonai es Dios Señor. Benedicto XVI indicó que deberíamos respetar la tradición judía y emplear en la liturgia, en los cantos el término Adonai en vez de Yahvé.
El segundo mandamiento exige no emplear el nombre de Dios en vano: Se emplea cuando esta profusamente en la nuestra boca, ajenos a que Dios se mueve en el misterio. Ese misterio que proclama el mismo Dios en el episodio de la zarza a la que alude la antífona de hoy: “Soy el que soy”, alguien que rebasa cualquier definición o descripción.
Lo que es comprensible y necesita tenerse siempre en cuenta es el legado que deja a los seres humanos. El legado que el en el Antiguo Testamento se resumen en las leyes de conducta proclamadas en el Sinaí. Pero sobre todo ofrece, lega la preocupación por su pueblo, por su salvación de los enemigos poderosos que le acechan. Por eso a él han de acudir. Adonai les pondrá como condición acomodar su vida a lo prescrito en el Sinaí a Moisés. Esa condición no se cumple y accede la perdición del pueblo, de la que se van librando porque el legislador es ante todo misericordioso, no renuncia a la salvación del pueblo. Misericordioso es el atributo más referido a Dios en el Antiguo Testamento
El momento culminante de la acción misericordiosa, del compromiso afectivo con los hombres es la “entrega” de su Hijo: “tanto amó Dios al mundo que les entregó su hijo”. El poder del brazo de Adonai brota de la misericordia de su corazón. El legislador es ante todo pastor, que conduce a su pueblo con cariño, que cuida de él. Las leyes que dicta son efecto de ese amor a sus “ovejas”. Adonai, pastor de la casa de Israel. Pastor cuidadoso, que defiende las ovejas del lobo, les ofrece pastos abundantes, y también carga sobre sus hombros a la extraviada…, se definirá el Dios hecho hombre en Jesús de Nazaret.
Comentarios
Hasta ahora se han publicado
0 comentarios. Déjenos también su opinión.