5 de mayo de 2017
1 comentarios
Los laicos de la fraternidad de Nuestra señora de Atocha proponen cada año con motivo de la fiesta de santa Catalina de Siena una conferencia sobre asuntos de actualidad. Este año el tema fue “Ciencia y Religión ¿enfrentadas? “. Estuvo a cargo del profesor Valderas, asiduo en espacios de la página web de dominicos.org. Me ha sorprendido el título. La ciencia discurre en un ámbito distinto del de la Religión, son líneas que se cruzan, nunca se enfrentan, porque no se encuentran. No así fe y razón que si se ven en no pocos temas. Me temo que ello responda: a) por una parte a que en el ámbito social o popular, el de los medios, el conocimiento es ciencia o es fe, o b) a que se parta de la afirmación ya académica de que no hay más conocimiento que el empírico, el que aportan los sentidos. Se margina así al conocimiento de lo que se llama Filosofía, de la pregunta por las últimas causas que diría Aristoteles, por asuntos como el origen del ser, su destino, la existencia o no de un proyecto en la evolución creadora, el sentido del vivir humano, la peculiaridad de ser persona humana y no reducirlo a un ser más de la creación…, y todo el amplio ámbito de lo ético, del bien y mal moral, de la justicia, del amor… De nada de esto sabe la ciencia, que a partir de cuestiones formales, las matemáticas, trata de reinterpretar científicamente lo que los sentidos perciben. La ciencia se preocupa de lo que es, no lo que debe ser, de lo que es, no el fin último de lo que es, de lo que es, no del sentido del ser, de lo que es, no de lo bello de ser, de lo que es, no de los sentimientos hacia el ser, el amor o la admiración; eso que no le preocupa ni estudia pertenece, sin embargo, a lo más hondo de las preocupaciones humanas de todos los tiempos. La razón filosófica y la fe son las que se inquietan por ello, acudiendo a fuentes distintas, la pura razón o la revelación. Razón filosófica y fe son las que pueden entrar en conflicto, pero también en ayuda mutua, cuando cada una se mueve en su ámbito. El problema grave que, está en el fondo de comparar la ciencia con la fe, es el rechazo de la Filosofía, y con ello de afrontar las preocupaciones más serias de la condición humana. Recordemos las preguntas que formulaba Kant: ¿qué podemos conocer? ¿qué debemos hacer?, ¿qué nos cabe esperar?, ¿Quién es Dios?, en definitiva ¿qué es el hombre?. La ciencia puede ayudar ofreciendo bases experimentales, pero se ve incapaz para responder a esas preguntas. La razón filosófica, la fe sí las abordan, desde puntos de vista distintos.
Comentarios
Hasta ahora se han publicado
1 comentarios. Déjenos también su opinión.
alfredo
9 de mayo a las 9:12
muy malo